Contenidos
Método de narración
Contar historias es una habilidad humana que probablemente sea tan antigua como la propia humanidad. Casi todas las culturas antiguas tienen su propia forma de contar historias, y muchas religiones modernas siguen utilizando el lenguaje de la historia para transmitir sus mensajes. Sin embargo, no todas las historias son iguales. Hay muchos tipos diferentes de historias, cada una con un conjunto único de características y usos.
La palabra escrita es la forma más común de contar historias. Al igual que hay diferentes géneros y tipos de historias, hay diferentes estilos y expresiones de escritura. Desde la poesía hasta la prosa, desde la forma de cuento hasta la novela, desde la epopeya hasta la saga, desde el misterio hasta el thriller, y desde la no ficción hasta la fantasía.
Los distintos géneros de la narrativa escrita -fantasía, crimen real, ciencia ficción, romance, etc. – tienen sus propios tropos (temas o recursos comunes) que les son propios. Las historias de amor, por ejemplo, suelen tratar de los amantes o del héroe y la heroína separados por los obstáculos y las decisiones que tienen que tomar. Algunas historias se cuentan de forma lineal, otras de forma no lineal.
Tipos de perspectiva narrativa
Tras superar una gran prueba, regresan a casa con una recompensa o una nueva sabiduría, algo que ayudará a su comunidad. Muchas historias modernas siguen esta estructura, desde el Rey León hasta La Guerra de las Galaxias.
Es diferente porque no tiene necesariamente un final feliz. La primera parte de la historia se dedica a preparar el escenario, y le siguen una serie de pequeños retos y una acción creciente antes de una conclusión culminante.
La historia más importante, el núcleo del mensaje, se sitúa en el centro y se utilizan las historias que la rodean para elaborar o explicar ese principio central. La primera historia que empiezas es la última que terminas, la segunda historia que empiezas es la penúltima, etc.
Los bucles anidados funcionan un poco como si un amigo te hablara de una persona sabia en su vida, alguien que le enseñó una lección importante. Los primeros bucles son la historia de tu amigo, los segundos bucles son la historia de la persona sabia. En el centro está la lección importante.
Pero ten cuidado: no quieras desvelar demasiado de la acción desde el principio. Intenta insinuar algo extraño o inesperado, algo que necesite más explicación. Da a tu audiencia la información suficiente para mantenerla enganchada, mientras retrocedes y estableces el escenario de tu historia.
Qué tipo de narradores hay
El pensamiento en los cuentos está casi siempre relacionado con un público infantil. Sin embargo, esto no tiene por qué ser así, ya que hay muchos tipos de cuentos. Algunos de ellos están enfocados al público adulto, mientras que otros, con temas más infantiles, serían para niños.
Un cuento se define como una historia corta, que puede estar basada o no en hechos reales, y cuyos personajes son reducidos. El argumento de estas narraciones es muy sencillo y puede contarse por vía oral o escrita. En ella se mezclan aspectos de ficción con hechos reales, y sirve para contar una historia pero también para que los niños aprendan valores, moral, etc.
No podemos decir que haya una única clasificación de los tipos de cuentos que existen, ya que hay autores que los clasifican en mayor número que otros. Por ejemplo, según la conferencia “Del cuento popular al cuento literario” de José María Merino, existen dos tipos de cuentos:
Se definiría dentro de los cuentos populares, uno de los más leídos y que se caracteriza por ser una historia que no es real, que ocurre en un tiempo y espacio desconocidos y que tiene una prueba que hay que superar para llegar al final feliz.
Tipos de relatos cortos
¿Cómo puede seguir el ritmo de un ecosistema de marketing que se acelera? Acompáñenos en la Brandweek del 12 al 16 de septiembre en Miami junto a los principales directores de marketing, fundadores y creadores de cambios de Gatorade, Marriott, Alo Yoga, Campbell’s, Uncommon James y otros. Reserve ahora.
Crees que estás siendo muy inteligente y original con la narración de tu marca. De hecho, no es así. Desde Shakespeare hasta Spielberg y Soderbergh, en realidad sólo hay siete tipos diferentes de historias, según sugirió el miércoles un panel de la Advertising Week organizado por TBWA. El reto consiste en encontrar la que mejor se adapte a tu marca y, a continuación, contarla de forma hábil, creíble y -si vas a invitar a los consumidores a participar en la historia- con sumo cuidado.